En esta entrevista, Michael McCall de la Facultad de Ciencias de la Geoinformación y Observación de la Tierra de la Universidad de Twente, Países Bajos, sostiene que existe una clara demanda de capacitación en los Sistemas de Información Geográfica Participativa (SIGP). Las comunidades los consideran valiosos para reclamar tierras, gestionar recursos, resolver conflictos, y registrar sus paisajes culturales. Las instituciones de capacitación entienden esta demanda a través de intermediarios, tales como organizaciones de base comunitaria y escuelas locales. SIGP se encuentra en un buen momento porque el hardware y software están progresando rápidamente en términos de disponibilidad, facilidad de uso y transparencia. Sin embargo, la capacitación no es sólo una cuestión de tecnología, sino de intercambio de ideas entre los usuarios y los capacitadores en aplicaciones eficaces y aceptables. Los retos que enfrenta SIGP no son únicos: ¿Qué miembro de la comunidad participa en el mapeo? ¿Quién selecciona a los participantes? La nueva información se genera y puede ser difundida al dominio público, pero algunos se muestran reacios a compartirla por buenas razones. Así, lo central de la ética SIGP es: ¿quién controla y quién comparte? ... más.
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